Zeitgeist
Hace 15 años me desperté de madrugada para consultar si el dominio F5interactiva.com estaba libre. Llevaba tres años trabajando como autónomo bajo mi propio nombre, pero el negocio empezaba a crecer y con un equipo de trabajo ya formado necesitábamos un nombre de empresa. F5 era la tecla para actualizar el navegador, al igual que nosotros actualizábamos a nuestros clientes en internet. Fue un flechazo.
En aquel momento, te conectabas vía Netscape a Google, un nuevo buscador que nos parecía un poco soso pero brillante, y que luchaba por competir con Yahoo y Altavista. Facebook e Instagram esperaban aún a que el concepto “red social” se inventara, nos mandábamos SMS (cortitos y sin imágenes), Amazon no era más que una tienda de libros y Apple “solo” una marca de ordenadores para diseño gráfico, muy a la sombra de la todopoderosa Microsoft.
Mientras tanto, nosotros desarrollábamos páginas web escribiendo a mano código php/html, y poníamos imágenes pequeñas, por aquello del ancho de banda. Aún no sabíamos lo que era trabajar en remoto, pero ya soñábamos a lo grande trabajando codo a codo con empresas grandes, pequeñas… ayudándoles a llevar a cabo sus proyectos, sus ilusiones.
Por el camino hemos aprendido sobre coches, equipos eléctricos, balnearios, pan ecológico, software, recursos humanos, bodas, jardines, muebles, telecomunicaciones, educación, psicología, emprendimiento… pero sobre todo hemos aprendido que nuestro valor no es tanto el código de una web, sino nuestra capacidad para entender a las personas y contar historias alrededor de sus productos y servicios, con esos trocitos de emoción que son, en definitiva, las imágenes, los textos y las ideas.
Un día te levantas por la mañana y notas algo diferente en el aire. Sientes que las cosas han cambiado… y tú con ellas. Al igual que las aves migratorias levantan el vuelo en septiembre sin mucha más explicación, el “Zeitgeist” o “espíritu del tiempo” nos llama a nosotros también.
Nos sentimos diferentes, más maduros y plenamente identificados con nuestros clientes, siendo parte de sus historias, de sus proyectos… parte de ellos. Siendo un mismo equipo, al que aportamos nuestras ideas para emocionar a su audiencia. Si alguna vez has sentido que es genial trabajar con nosotros, te decimos lo mismo: IDEM.
Hasta entonces, de corazón y en nombre de todos los que han formado parte de F5 y ahora de IDEM, te damos las gracias por ser parte de nuestra historia, y de paso te deseamos una muy Feliz Navidad.

Fundador de F5 Interactiva y director de la nueva IDEM LABS.
